Pero estuvimos viendo las motos clásicas que se habían reunido y pudimos disfrutar de muchas marcas y modelos conocidos a la vez que muy antiguas, Villof, Alcyon, Sanglas, Lube, Ossa, Vespa, Lambretta, y de un micro coche del que algunos pueden haber oído hablar pero que quizá no conocían, el Biscúter (el coche zapatilla) del que a continuación escribiré unas reseñas históricas, del que os adelanto que los primeros carecían de marcha atrás por lo que para aparcarlo había que arrimar la parte delantera hacia el bordillo y luego el conductor se bajaba y levantándolo de detrás lo arrastraba hacia la acera, qué? curioso?. Más adelante le pusieron marcha atrás pero muchas veces cuando se ponía esa marcha luego no se podía quitar, así es que el cochecillo tenía que ir marcha atrás hasta el taller para que el mecánico la sacase.
El Biscúter.-
Las dificultades económicas
de Europa después de la Segunda guerra mundial hicieron populares coches diminutos en muchos países europeos.
España tenía una situación aún más complicada pues el gobierno en el poder era
rechazado por la mayoría de países al ser considerado como restos del fascismo,
por lo que se nos tenía aislados. Las circunstancias de Europa hicieron que
triunfara el concepto de micro-coche. Uno de los inventos franceses, a finales
de 1940, fue un vehículo al que su diseñador llamó Bi-Scooter, cómo dos scooters o
una con cuatro ruedas, pero no despertó ningún interés, aun a pesar de que el
diseño era de Gabriel Voisin, diseñador de aviones y dueño de la fábrica de
coches Voisin. Nosotros que, debido a nuestro aislamiento, no teníamos
posibilidad de copiar de nadie así como muy dificilmente disponer de materia
prima, no teníamos producción de coches pero se consiguió que la firma francesa
vendiese la patente del minicoche a
Autonacional S.A. de Barcelona, que en 1953 introdujo en el mercado español las
primeras unidades de fabricación.
Curiosamente al principio no tenía nombre
formal, sólo como “Serie 100” .
Popularmente se le dio el nombre de zapatilla por su parecido con ellas. No
tenía puertas, ventanas, arranque eléctrico, motor limpiaparabrisas, marcha
atrás. Su motor un Hispano Villiers de un cilindro y 197 cc, dos tiempos, que
desarrollaba 9 C .V.
El arranque era con un tirador y la transmisión era solamente a la rueda
delantera derecha. El curioso sistema de frenado actuaba sobre la transmisión y
con cables a las ruedas traseras.
Para la fabricación del
coche se estuvo usando el aluminio, pero cuando nació Seat el estado le cortó
el suministro de material a Autonacional teniendo que ingeniárselas para
fabricarlos con acero (acero que se obtenía desplegando los bidones de aceite
del Plan Marshall).
Esta visita al evento de Cabanes me dará pie a hacer una reseña histórica de las marcas que aquí se verán y que publicaré en otro artículo.
De momento quedamos con las fotos:
Buenos dias GUILLERMO.
ResponderEliminarBonito reportaje, un paseo por el pasado.
Este tipo de concentraciones atrae a mucha gente aficionada al mundo de la moto.
Un saludo.
Buenas tardes. Pasamos una mañana bien en donde había bastante que ver. Es de los lugares en donde más modelos de clásicas he visto, una de ellas de principios del siglo XX.
EliminarSaludos.